Psicólogo para coordinación de parentalidad en Valencia
Cuando una relación romántica no prospera, la comunicación es deficiente, no existe un proyecto de vida en común o no hay una voluntad por comprender las necesidades de la otra persona, es muy probable que la pareja termine por separarse, sin más consecuencias para ambos a nivel emocional que el propio proceso de un duelo asociado a la ruptura.
Sin embargo, una separación o un divorcio resultan bastante más complejos en el momento en que la pareja o matrimonio ha tenido descendencia durante el curso de la relación.
Es cierto que muchos padres, tras separarse o divorciarse, son perfectamente capaces de manejar sus diferencias con el otro progenitor y consiguen mantener una comunicación e interacción cordiales por el bien de sus hijos, habitualmente menores.
Aun así, también existen numerosos casos en los que la separación y el posterior divorcio se convierten en un auténtico caos ya no solo para las partes, sino para los hijos del ya ex matrimonio.
Un gran número de padres y madres divorciados acumulan una ingente cuantía de demandas, denuncias y litigios que no parecen resolver la problemática de fondo, sino que suelen contribuir a agravar el resentimiento, rencor y dolor que se suele haber generado hacia la otra parte y que puede llevar a emplear a los hijos como “arma arrojadiza” de un lado al otro.
La coordinación de parentalidad nace en Estados Unidos hace más de treinta años con el objetivo de reducir, minimizar y, dentro de las posibilidades, eliminar los altos niveles de conflictividad y litigiosidad entre progenitores por medio de un procedimiento alternativo de resolución del conflicto (PAC).
Por tanto, la figura del coordinador de parentalidad tiene por objetivo la reducción de la conflictividad entre las partes mejorando la comunicación y la interacción entre las mismas; ayudar a implementar un plan de parentalidad diseñado específicamente para cada caso, que permita cumplir las medidas judiciales con respecto a los menores; seguir dicho plan de parentalidad para asegurar el cumplimiento o modificación del mismo en caso de ser necesario y, también, tratar de reducir el patrón de re-litigios innecesarios.
Al contrario que en la mediación, el rol de coordinador de parentalidad es mucho más activo y suele estar implicado en más áreas de la vida de la familia: como la escuela o la familia extensa, si lo considerase necesario.
Actualmente, en la Comunidad Valenciana la figura del coordinador de parentalidad se ha instaurado como figura adscrita a los Juzgados, de manera que puede ser designado por un Juez en los casos que considere que los menores pueden beneficiarse de este procedimiento interventivo con sus progenitores.
En estos casos, el coordinador de parentalidad es una figura de autoridad que puede consultar todas las fuentes informativas (escuela, pediatras, actividades extraescolares, entre otros) que estime oportunas con el fin de establecer el mejor entorno cotidiano para los menores.
Sin embargo, dos progenitores con alto nivel de conflictividad también pueden beneficiarse de forma autónoma de la ayuda de un psicólogo experto en coordinación de parentalidad que les sirva de guía sobre cómo actuar de la mejor manera posible por el bien de sus hijos.
Es decir, no es necesario que un juez designe a un psicólogo para desempeñar el rol de coordinación de parentalidad, sino que dos progenitores pueden (si lo desean y lo consideran conveniente) buscar este servicio en pos del bienestar de su/s hijo/s.
En Dopsi, contamos con psicólogos para coordinación de parentalidad con la formación acreditada para el desempeño de dicho rol, y que tratarán de esclarecer y proporcionar las medidas y acciones más adecuadas para el desarrollo cognitivo y emocional óptimo de los niños.